El técnico de Palmeiras, Abel Ferreira, reconoció que el 3-0 sufrido ante LDU Quito en la ida de la semifinal de la Copa Libertadores 2025 representa “nuestra primera derrota en esta competencia” y admitió que se equivocó en la formación del medio campo, señalando que “nos superaron en el primer tiempo”.
Ferreira agregó que “quedan 90 largos minutos en nuestro estadio” y que intentarán igualar o superar el marcador en la vuelta. También cuestionó la intensidad del rival, calificó como “muy fuerte como local” a LDU y manifestó que, a su juicio, “no fue penal y se señaló”, en alusión a una decisión arbitral que complicó al Verdão.
¿Qué errores admitió Abel Ferreira tras la goleada ante LDU Quito?
En conferencia de prensa tras el partido, Ferreira fue autocrítico: “Me equivoqué en la formación de la línea media. Nos costó entrar en el juego.”
Subrayó que el equipo fue superado desde los primeros minutos, admitiendo que el rival impuso su ritmo y que el “intensidad del adversario nos complicó”. También puntualizó que: “Hoy el rival fue mejor y punto… Siempre apuntamos a ganar. Es una derrota dura.” Además, aludió a una acción polémica: “En mi opinión, no fue penal y se señaló.” Esto evidencia que el técnico considera que la actuación arbitral jugó en contra, aunque aceptó que la responsabilidad principal fue del equipo. Finalmente, se refugió en el factor de localía para la vuelta: “En nuestra casa haremos el mismo número de goles o más.”
¿Cómo valora Abel Ferreira el rival y qué mensaje envía para la vuelta?
Ferreira reconoció que LDU Quito “ha demostrado ser muy fuerte como local”. Esta confesión del técnico revela el respeto que tiene hacia el adversario, especialmente en la altura de Quito, donde el equipo ecuatoriano se mostró dominante. Aunque el resultado fue negativo para Palmeiras, Ferreira insistió en que la serie no está cerrada: “Quedan 90 largos minutos en nuestro estadio.”
Con esa declaración, envía un mensaje de confianza a su plantilla y afición: aún cree en la remontada, pese al golpe.
La derrota implica que Palmeiras debe jugar al límite en la vuelta: deberá corregir su línea media, elevar la intensidad y evitar errores tácticos para revertir la eliminatoria en su casa.